Hacía muchos años que no leía nada de Rushdie y este libro de 2008 lo tenía en las estanterías de libros sin leer y hasta ahora no me había llamado la atención. El primer libro que leí de este autor fue Hijos de la medianoche y me quedé prendada de su manera de narrar. Después leí Los versos satánicos y El último suspiro del moro, también leí un ensayo sobre Nicaragua, titulado La sonrisa del jaguar.
Abandoné la lectura de las novelas de Rushdie pero no recuerdo los motivos, quizás me parecieron repetitivos y previsibles. Pasado el tiempo me ha parecido interesante retornar con La encantadora de Florencia. Estamos ante una obra que mezcla historia (la extensa bibliografía al final del libro muestra lo bien que se ha documentado) y ficción para adentrarse en la narración de historias, terreno que el autor conoce bien.
La novela está ambientada a finales del siglo XVI, cuando un extranjero llega a la corte del emperador mogol Akbar el Grande, en la ciudad de Fatehpur Sikri. El
mensajero es portador de un secreto, la historia de una mujer misteriosa, versada en las artes del encantamiento y la brujería, y de su viaje imposible a la lejana Florencia.
Obviamente esta mujer es de una gran belleza y ante ella caen rendidos los hombres, no se sabe si por bella o por bruja. Unas historias se superponen a otras y no he acabado de entrar en estas historias fantásticas.
El argumento de la novela es una apuesta por el diálogo entre culturas, especialmente entre Oriente y Occidente, tema que utiliza como excusa para analizar el inicio de las relaciones entre estos dos mundos, que hoy parecen sumamente conflictivas.